El
Resplandor (The Shining)
Vamos
a tratar una importante película de culto que además marcó un hito en la
historia de cine.
Ficha
técnica
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Nombre
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El
resplandor “The Shining”
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Director
y productor
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Stanley
Kubrick
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Guionista
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Stanley Kubrick y Diane Johnson
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Nacionalidad
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Estadounidense
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Estreno
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1980
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Género
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Terror Psicológico
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Lugar de exhibición
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EEUU
y después difusión internacional
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Interpretación
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Actor
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Personaje
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Jack
Nicholson
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Jack
Torrence
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Shelley
Duvall
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Wendy
Torrence
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Danny
Lloyd
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Danny
Torrence
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Scatman
Crothers
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Dick
Halloran
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La
película está basada en el libro homónimo de Stephen King (cuyo final difiere
bastante de éste), y es reconocida como una de las obras maestras de Kubrick,
junto a “Espartaco” (1960), “2001: Odisea del espacio” (1968) o “La Naranja
Mecánica” (1971).
Jack
Torrence acude a una entrevista de trabajo para encargarse del mantenimiento
del hotel Overlook durante el invierno. A pesar de que un anterior revisor en
su misma situación asesinara a su familia y se suicidara, acepta el cargo y se
traslada allí junto a su mujer Wendy y su hijo Danny, quienes sufrirán el
aislamiento y el frío claustrofóbico del invierno en el hotel, haciendo
enloquecer a Jack, quien intentaba escribir una novela, seguirá el mismo camino
que Grady el antiguo guarda. Además, Danny cuenta con una habilidad
suprasensorial llamada “El Resplandor” y que le permite ver sucesos del pasado
o del futuro, así como comunicarse con otras personas que tienen el mismo poder
como el cocinero del hotel Dick Halloran.
Se
trata de una historia de horror verosímil que nos permite adaptarnos rápido a
la piel de los personajes y sus circunstancias, realista hasta donde el
argumento se cruza con los fenómenos y las visiones irracionales del hotel, en
los cuales se puede apreciar una influencia Hitchcockniana sobre Kubrick que
son parte indispensable en esta obra de terror. Los temas que aparecen son la
familia, la soledad, la responsabilidad, y la psicosis que finalmente acaban
sufriendo los protagonistas, unos más que otros.
La
mayoría de escenas pasan por reales, las circunstancias y contexto de la
historia, incluso podría serlo la locura de Jack debido a lo antisocial de su
estancia en el hotel y la presión e impotencia que siente frente a su trabajo
de novelista. A pesar de esto, las escenas de las visiones del niño, el
fantasma de la mujer que además le agrede supuestamente, la liberación de Jack
del almacén, o la introducción de Jack en el cuadro de 1921 en la escena final.
Los
personajes son pocos pero muy bien desarrollados, empezando por Jack Torrence
interpretado por Nicholson que ya apareció en la gran pantalla años antes en
“Alguien voló sobre el nido del cuco” (1975), razón por la cual no se le quería
para el papel, pues la gente le vería directamente como el “supuesto desequilibrado
mental" de la anterior obra, aunque finalmente logra
representar a su personaje a la perfección, su evolución psicológica que nos
muestra el ascenso a la más descabellada locura como se deduce por su trabajo
literario que culmina intentando asesinar a su familia. La figura de Wendy está
exagerada por su intérprete, es una continua sobreactuación, según se rumorea
por el acoso sufrido durante el rodaje para que se metiera en el papel, también
sufre una transformación psicológica de mujer fiel a su matrimonio para
desconfiar y escapar de su marido. Danny nos plantea un misterio que escapa a
nuestras capacidades, es su capacidad de Resplandor la que le permite ver
visiones y enterarse de lo que ocurre en el hotel. Para complementar esta
habilidad está Halloran el cocinero (interpretado por Scatman Crothers, fue
recomendado por Nicholson tras aparecer en “Alguien voló sobre el nido del
cuco”), que establece una conexión con Danny y se preocupa por la salud de la
familia, pues intuye que Jack está volviéndose loco, su vehículo es la
herramienta que usan para escapar del hotel. Es irónico que tuviera el
Resplandor pero no pudiera anticiparse a su propia muerte.
Los
planos, la música, y el ritmo están correlacionados a la perfección. El sonido
es continuamente desagradable, molesto, que causa incomodidad y vuelve más
tensa la escena. El propio comienzo de la película es un Gran Plano General
donde aparecen los créditos y el sonido es continuamente estridente. Las
conversaciones poco importantes están filmadas en planos americanos y el sonido
ambiental está ausente, mientras las más importantes están en primeros planos
alternados y la música psicótica se vuelve más trascendente. Algunos planos
destacados pueden ser los dos cenitales que muestran uno el laberinto, y dos el
niño jugando en un “panal de sangre” en un pasillo del hotel antes de ver a las
gemelas, el contrapicado que muestra el picaporte de la 237, o el nadir de Jack
sobre la puerta del almacén, todos ellos acompañados de música acorde a una
situación poco armoniosa que se puede quebrar en cualquier momento. Además fue
innovadora al introducir la Dolly, una grúa para portar la cámara que permitía
grabar tomas en movimiento, recurso que es explotado gracias al triciclo de
Danny que nos muestra las estancias del hotel. Algunos planos en movimiento
realizan ondulaciones que pueden ser interpretadas como una presencia
fantasmagórica, por ejemplo. El tratamiento de la luz es un símbolo en la
escena final del laberinto, cuando Danny intenta escapar, y Jack queda
encerrado finalmente, tal vez porque no aprendió la salida como su hijo al no
haberle dedicado nada de tiempo, y encerrándose en sí mismo.
Hay
varias escenas célebres de la película así como imitaciones y parodias, que nos
suelen mostrar siempre la escena del hacha rompiendo la puerta del baño, en la
cual hay un fallo de rodaje (tras hacer una franja en la puerta Jack desiste de
seguir rompiéndola, pero en la siguiente escena aparece una segunda franja,
probablemente de una segunda toma la cual debería haber sido rodada después de
la escena incongruente, no antes), las dos gemelas asesinadas que han pasado a
la historia del cine, o cuando Wendy descubre que Jack se había vuelto loco y
le amenaza con el bate.
El
director consigue poner la piel de gallina con las perspectivas y la
ambientación de cada escena, así como el contexto, lo cual consigue hacer de
esta película una buena obra de terror. Las lagunas y los misterios sin
resolver son parte de este género, la irracionalidad de los fantasmas que
liberan a Jack, las visiones que no parecen ser falsas, el hecho de que el
hotel esté situado sobre un cementerio indio, son aspectos que dejan abierta la
trama y que probablemente, si pudieran ser explicados racionalmente harían
perder mucho a la historia. La escena final la interpretaría como que el guarda
supervisor del hotel sufre siempre la misma historia de soledad y locura, y
termina asesinando a su familia; Grady fue el anterior, y Jack será el próximo
que quede atrapado (tanto en el espacio como en el tiempo) teniendo que repetir
la historia con el próximo encargado para poder “escapar” de la maldición del
hotel, que es explicable a través de la excusa del cementerio indio. Es notable
la mano de Kubrick en sus perspectivas cónicas e imágenes desconcertantes tales
como los fantasmas del oso y el hombre en una cama que ve Wendy, que los
analistas proponen que sea una metáfora de una resurgida URSS amenazante, y que
la sangre del ascensor y las imágenes del hotel simbolizan el holocausto nazi,
así como otro trasfondo en el cual se explica que el hombre no llegó a la Luna.
A pesar de tener lógica, son demasiado rebuscadas y a día de hoy carecen de
sentido, dejando a la peli como una de las mejores del género de terror
psicológico, y no tanto como un jeroglífico kubrickano. Un 8’5 sobre 10 por las
buenas interpretaciones, sonido, planos, a pesar de tener un argumento no
sobresaliente y una velocidad a veces demasiado lenta, es una película para ver
más de una vez.
Marcos
Domínguez Velad
2-3
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